Entre lo local y lo universal: exposición muestra bocetos de una búsqueda de identidad propia

Carlos Vindas Rojas
Estudiante de Comunicación
Asistente del Museo de la Universidad de Costa Rica

Francisco Amighetti (1907-1998) y Manuel de la Cruz González (1909-1986) fueron dos artistas costarricenses que lograron darse a conocer por medio de las Exposiciones de Artes Plásticas, entre 1928 y 1937.

La exposición Bocetos de lo local y de lo universal se ha encargado ‒en tres ocasiones‒ de mostrar cómo estos artistas se vieron influenciados por una discusión bipartita que hacía mirar hacia Europa y adoptar nuevas tendencias estéticas, pero también contemplar las realidades socioculturales locales, así como las tradiciones latinoamericanas, en la búsqueda de una identidad propia.

La primera vez que se presentó esta exposición fue dentro del marco del 20 aniversario del Centro de Investigación en Identidad y Cultura Latinoamericanas (CIICLA), y tomó como lugar la Galería de la Escuela de Artes Plásticas, entre el 12 y 29 de agosto del 2014.

Tan solo unos cuantos días después, la muestra se apoderó de la Galería de la Facultad de Letras del 17 de setiembre al 15 de octubre del 2014. Finalmente, 6 años después se hizo presente en la Galería del Consejo Universitario para continuar con su divulgación.

Los bocetos expuestos de Amighetti y González son el reflejo de un proceso de trabajo realizado en el CIICLA. Entre el 2013 y el 2014, este centro de investigación, de la mano del Museo de la Universidad de Costa Rica (Museo UCR), se encargó de escanear los dibujos de estos artistas y catalogarlos para su debida conservación. Por lo tanto, los trabajos expuestos son imágenes de dichos escaneos, las cuales son casi idénticas de los originales.

Actualmente, la colección está bajo la custodia del Sistema Editorial de Difusión Científica de la Investigación (SIEDIN). En este sentido, las tres instancias universitarias han velado por el resguardo de este patrimonio cultural del país.

Francisco Amighetti fue artista plástico y escritor. Elaboró muchas pinturas en óleo, acuarela y murales, algunas de estas conservadas en los edificios del Banco Nacional de Alajuela, el Colegio Lincoln y la Caja Costarricense de Seguro Social. Además, se reconoce su notable labor en la xilografía y cromoxilografía, al figurar en museos y colecciones dentro y fuera del país.

Su prosa sobresale al ser capaz de contar su sentir sobre el paisaje, las reacciones humanas y los ambientes extranjeros. Todo lo anterior lo hizo merecedor de distintos premios y reconocimientos, como el Premio Nacional de Cultura Magón (1970), el Premio Nacional Aquileo J. Echeverría (1990) y el Premio Teodorico Quirós (1998).

Asimismo, en 1993, la Universidad de Costa Rica le otorgó el título de doctor honoris causa y, en el 2010, la Asamblea Legislativa lo declaró Benemérito de la Patria por ser considerado un ciudadano insigne, emblemático y destacado.

Igualmente, Manuel de la Cruz González fue artista plástico y escritor. Se dedicó a trabajar el dibujo, el grabado, la témpera y el óleo. Destacó por ser de los creadores que introdujo el arte moderno y tendencias vanguardistas como el arte abstracto, lo cual revolucionó el mundo de las artes plásticas del país.

Su trabajo, expuesto en Costa Rica, Cuba, Venezuela y Estados Unidos, lo llevó a obtener distinciones, como el Premio Nacional Aquileo J. Echeverría en Pintura (1963), el Premio Nacional de Cultura Magón (1981), la Medalla de Oro al Mérito, otorgada por la Presidencia de la República en 1967, entre otras.